Namasté ser de luz.

Durante mi vida he experimentado mi buena dosis de cambios. Algunos muy anhelados, otros inesperados y otros más sorprendentes. El cambio pone muy loco al ego. A veces prefiere quedarse en una situación de dolor con tal de no abrirse a la posibilidad de novedad (y por tanto -según él- riesgo) 

La vida es un eterno dinamismo de cambios: renuncias y despidos de empleos, nacimientos y muertes de seres queridos, mudanzas de hogares, comienzos y términos de estudios, noviazgos, divorcios, cambios de año, renuncia de hábitos… 

En cada cambio, por más pequeño que haya sido, se experimenta un duelo. Ente más permiso te des de vivir la pérdida o transformación y sentir lo que sea que te hace sentir, más sanación recibirá tu corazón y por tanto, más paz interior experimentarás.

Esta semana te comparto una meditación que te ayudará a transitar por las inminentes transformaciones de la vida. Una vez que termines de verlas, por favor compártenos cómo te sentiste.

Te mando un abrazo de flor de loto.

Recuerda, eres luz y amor. Eres abundancia. Elige experimentarla en todas las áreas de tu vida.

Con todo mi amor,

Andrea de la Mora  ❤