Una parte importante de la manifestaciĂłn de abundancia es saber que eres merecedora de recibir las bendiciones que el Universo tiene para ti.
En mi experiencia, el saberte merecedora o digna está ligada a tu autoestima, tu confianza en ti misma y tu fuerza de voluntad.
Hoy quiero hablar del poder personal. De entrada, ¿qué es el poder personal? Es la capacidad individual que tenemos todos los seres humanos para crear. Estamos en una experiencia que nos permite crear todo lo que vivimos. Nuestras ideas, pensamientos y emociones son las herramientas con las que vibramos a nivel sutil y desde donde creamos inconscientemente o co-creamos deliberadamente.
Ahora, el primer punto para contactar con tu poder es saber que vive en ti. Para poder reconocer esa fuerza en tu interior, es necesario que contactes contigo a travĂ©s de cualquier práctica que te vincule a tu espĂritu. Realizar caminatas en la naturaleza, meditaciĂłn, algo de expresiĂłn artĂstica, convivir con animales, hacer oraciĂłn, cantar, hacer rituales, conectar con el amor… cualquier actividad que puedas hacer todos los dĂas (puedes variarle) y que te ayude a reconocer que esa energĂa mayor -Dios, Madre-Padre, Naturaleza, Gran Misterio, Amor- vive en ti, de la misma forma en que vive en todo lo que Es.
Ahà reside tu poder personal, porque aunque lo vives de manera individual es la esencia que compone al resto. Ahà te das cuenta de que eres una gota del océano cósmico y que todo lo que pienses tendrá un efecto en tu vida. Está en ti conectarlo al amor y abundancia o a la carencia.
ÂżTe das cuenta? TĂş tienes el poder de confiar en ti y desde ahĂ, co-crear conscientemente tu vida.
Es tu turno. ÂżTe sabes merecedora? ÂżQuĂ© tanto confĂas en tu poder personal? Al manifestar, Âżes fácil para ti soltar el control y rendirte ante la sabidurĂa del Universo? CuĂ©ntamelo en los comentarios. LeerĂ© todos los comentarios y contestarĂ© algunos.
Recuerda, eres luz y amor. Eres abundancia. Elige experimentarla en todas las áreas de tu vida.
Con todo mi amor,
Andrea de la Mora ❤
Andrea gracias por este artĂculo en los Ăşltimos meses he estado trabajando en el merecimiento y si!! Es esa conexiĂłn divina con Dios donde se encuentra el poder dentro de uno mismo y que está ahĂ pero es desconocido hasta que se hace uno consciente de ello. Y al descubrirlo hay belleza, armonĂa, amor, felicidad, paz. 🙏
Hola mi querida andrea, creo que esa es la pregunta del millon. . Nos sentimos meresedores?? O como trabajamos esa parte de sentirnos meresedores? Como podemos llegar a sentirnos realmente meresedores? Saludos!
Muchas gracias Andrea por tus publicaciones, son muy lindas. Hace un año que recibo señales de mis ángeles acerca de un asunto importantĂsimo en mi vida, son señales muy claras pero no logro confiar plenamente en ellas, siempre me surgen las dudas y temores sobre si son o no son señales, si las estarĂ© interpretando bien, sobre todo porque siento que el tiempo pasa y nada cambia, veo señales pero nunca se manifiesta nada. Muchas bendiciones.
Hola Andrea..muchas bendiciones para ti…gracias por todas las herramientas q das para asĂ poder tener una mejor calidad de vida…yo tengo q aprender a confiar más en mi .por q a veces flaqueo y me pongo ansiosa y eso me stresa.si reconozco q soy merecedora de todo lo q tengo..por q lo pido con mucha Fe ..!
¡ESO! Eres merecedora 🙂
Hola Andrea a travĂ©s de todo lo que escribes y enseñas he entendido que yo soy co creadora de mi realidad y siento que cuando me enfoco y confĂo lo que deseo se hace realidad en mi vida lo que tengo que hacer es dale mas fuerza a mi poder y entender que si soy abundante y que esta dentro de mi gracias por mostrármelo 🙏🏻
Namasté.
Gracias Andrea, tus enseñanzas siemopre me llegan en el momento preciso. Trabajando en el merecimiento, todavĂa me cuesta.
A veces me siento desubicada en la vida, no se como comprender las senales, se que Dios esta conmigo, sin embargo me pregunto: Que pasa conmigo, que estoy haciendo mal, por que no se me Dan las cosas?, Siento que el tiempo pasa y pasa, pero yo sigo igual, no avanzo, no pasa Nada en mi vida.