El día de hoy te comparto una meditación para que hagas mientras te desplazas de un lado a otro. Es muy común que las personas me dicen que no tienen tiempo para meditar. Esta es una creencia limitante que tiene que ver con que en realidad, no se hacen el tiempo para meditar, ya que si fuera prioridad; encontrarían la forma de incluirlo en su rutina, tal como lo hacen con las cosas que sí llevan a cabo.

Así que para ayudar a desmitificar la creencia de no poder porque no hay tiempo, te comparto una meditación que puedes hacer mientras vas en el bus, el metro, uber, manejando, en el tren, avión, barco… cualquier medio de transporte que utilices.

Hacerla te asistirá en co-crear un excelente día y llenar de amor y buena vibra el lugar a donde vayas. 

Es tu turno: ¿Cómo te sentiste al hacerla? ¿Qué visión tuviste de tu traslado? Te leo en los comentarios. 

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