Namasté hermoso ser de luz.

La abundancia es un derecho divino de todos los seres humanos. A toda edad, en todo momento. Cuando fuimos niños, vivimos en abundancia.

Primero, en nuestra etapa como bebés (por qué crees que son tan atractivos los bebés—-se saben pedacitos de la Divinidad) y más adelante, aunque ya creyéndonos separados de la Fuente, seguimos vibrando en merecimiento la mayor parte del tiempo.

Sin embargo, conforme pasan los años, desarrollamos un sentido de individualidad que sumando a nuestras experiencias de vida y las creencias limitantes que hemos comprado de la sociedad, nos sentimos poca cosa y tenemos que hacer un trabajo consciente y deliberado para volver a reconectarnos con la Verdad: somos seres amados y merecemos vivir en plenitud.

En el vlog de hoy, contesto una pregunta que puede ayudarte a transmitir ese mensaje a tus niños para que la labor de reconexión con su derecho divino sea más fácil. 😀

Después de ver el vlog, cuéntame en los comentarios, ¿qué prácticas haces para mostrarle a tus hijos su derecho a la abundancia? ¿Qué recomendaciones le das a los papás, futuros papás, maestros, tíos y humanos que convivimos con niños? Recuerda que leeré todos los comentarios y contestaré algunos.

Ya sabes, eres luz y amor. Eres abundancia. Elige experimentarla en todas las áreas de tu vida.

Abrazo de chicle para ti.

Saprema,

Andrea ❤︎