Namasté querido compañero de abundancia

Nuestro Universo es un lugar dual que tiene dos tipos de energía: la femenina y la masculina. Experimentamos la masculinidad al tener una intención, el espíritu y lo inmanifiesto. Y vivimos la feminidad en la acción, la naturaleza y la manifestación.

El Ardhanarishvara (imagen de la derecha) es la representación mítica de esta unión entre Purusha (masculino) y Prakriti (femenino) representada en el matrimonio sagrado entre Shiva y Shakti, la conciencia y la energía.

Cuando encarnamos, comenzamos a relacionarnos con estas energías en nuestro interior e interactuamos hacia el exterior a través de nuestra relación con nuestra madre y nuestro padre.

En la entonación consciente con la energía de la abundancia es mandatorio revisar nuestra relación con mamá y papá. Más allá de si los conociste o de si viven incluso, es importante perdonar, honrar y reconocer su papel en nuestra vida, su servicio hacia nosotros al darnos vida y tener claro que han hecho lo que han podido con los recursos que tuvieron o tienen, por tanto, no te deben nada. Déjame repetir eso: tus padres te dieron la vida por tanto, no te deben nada.

En mi experiencia como coach (y en mi vida) he notado que los seres humanos tendemos a culpar a nuestros padres y madres y responsabilizarlos de los resultados que hemos tenido.

La realidad es que tú eres un ser poderoso y no requieres más que amar sin condiciones para experimentar abundancia en todas las áreas de tu vida.

¿Estás listo para perdonar? ¿Deseas soltar viejos rencores? ¿Estás listo para ejercer tu poder y conectar con el amor incondicional?

Vas tú:
¿Qué aspectos detectas de tu relación con tu madre o padre que pueden mejorar?
¿Hay algo que perdonar?
¿Hay algo que soltar?
Compártenos al final de la publicación.

Eres luz, amor y abundancia.
¡Elige experimentarlas en todas las áreas de tu vida!

Con todo mi amor,

Andrea de la Mora  ❤